Sin duda, la noticia del día (aunque realmente ocurrió ayer) es el cierre de Megaupload, uno de los principales servicios de almacenamiento «en la nube» de todo Internet por diversos motivos relacionados con la propiedad intelectual. Pero el motivo del artículo no es debatir sobre este tema, si no llegar a plantear uno de los problemas que ha puesto de manifiesto el cierre contundente de un servicio se almacenamiento, en menos de 2 horas y que deja a todos sus usuarios y clientes sin el acceso y con sus datos almacenados, «secuestrados» por un organismo como el FBI sin ninguna garantía de poder recuperar dicha información ni del uso que el gobierno estadounidense pueda hacer con los datos que han retenido.
Imaginemos por un momento que, al igual que Megaupload, existen otras empresas en la nube que ofrecen almacenamiento, correo electrónico, páginas webs, información sobre productos, clientes, facturas, … comunicaciones…, en fín, que si de repente, por alguna orden judicial promovida por una sospecha de que algunos usuarios hacen un uso ilícito de uno de los servidores de la empresa responsable del almacenamiento, provoca que dicha empresa tenga que apagar sus servidores, y un organismo oficial se hace con toda la información de estos datos, podríamos tener un gran problema, no únicamente por la imposibilidad de trabajar, si no por la inseguridad de que un «extraño» tenga acceso a nuestros datos que, en caso de ser una empresa, son bastante importantes y «jugosos».
Estoy seguro que la metáfora de «la hormiga en el bosque» o, por si alguien no lo entiende, el pensamiento de… «Internet es muy grande como para que alguien se interese por mis datos«, puede consolar y tranquilizar a muchos, no obstante, seguro que a nadie le haría gracia que sus datos desaparezcan de golpe de un día al siguiente y menos si son imprescindibles para el día a día y los necesitamos para trabajar.
Dentro de los administradores de sistemas, el servicio en la nube es un arma de doble filo: por un lado nos ofrece una forma cómoda, barata y sencilla de quitar un problema de en medio (adiós a los problemas de ancho de banda, del consumo eléctrico, de reiniciar el servidor, de «se ha bloqueado el switch y ahora no conecta…«, pero por otro lado saben que «como en casa, en ningún sitio» y suelen preferir controlar ellos mismos los servicios más importantes: facturación, servidores de correo, páginas webs, comunicaciones, etc…
Así que la pregunta está servida…
Considerando que utilizáis «servicios en la nube» y que estos están alojados fuera de nuestras fronteras y que están en manos de leyes diferentes a las nuestras
¿Qué opinais sobre la fiabilidad que ofrecen estos servicios, y qué ocurriría si de repente, por algún motivo, dejase de funcionar, el equipo de soporte dejase de contestar o si simplemente, hicieran como con Megaupload y apagasen los servidores y todos los datos pasasen a disposición del FBI?